El pasado blanco del fiscal Torres-Dulce

Por Xavier G. Luque 

El fiscal general del Estado dimitió de la presidencia del Comité de Apelación después de perdonar una roja a Hugo Sánchez | "Cuando había exámenes y perdía el Madrid nos puntuaba más bajo", explicaron los alumnos | Sucedió en 1988 y explicó que ya había avisado de que tenía carnet del Madrid "desde los doce años"

"Me voy con la conciencia tranquila, siempre he obrado con honradez. Nunca negué que fuera socio del Real Madrid". El 26 de febrero de 1988 el hoy fiscal general del Estado, Eduardo Torres-Dulce Lifante (Madrid, 1950) presentó la dimisión del cargo de presidente del Comité de Apelación de la Federación Española de Fútbol. La polémica anulación de una tarjeta roja mostrada al crack blanco Hugo Sánchez acabó con su carrera en el fútbol. Apenas duró unos meses.

Todo empezó el 13 de febrero en El Sadar, donde el Real Madrid cayó por 2-1 en partido de Liga. El almeriense Juan Andújar Oliver expulsó a Hugo Sánchez en el minuto 58 y consignó una "agresión a un contrario" que, reglamento en mano le tenían que suponer entre uno y tres partidos de sanción.

El problema es que sólo cinco días más tarde el Madrid tenía un partido vital en el Bernabeu: semifinal de Copa ante una Real Sociedad que había vencido en la ida en Atocha por 1-0. El mexicano era fundamental para buscar la remontada ante los donostiarras.

Competición rompió sus hábitos y avanzó su reunión al martes 16 para acabar imponiendo el castigo mínimo a Hugo Sánchez. Y además abrió expediente a Andújar por no pernoctar en Pamplona la víspera del partido. "Nunca me sancionaron", recuerda Andújar. "¡Sólo habría faltado eso! No éramos profesionales, me daban siete mil pesetas por un partido ¿y encima tenía que faltar a mi trabajo? Llegué por la mañana y con el tiempo adecuado para prepararme. ¿La polémica? No me preocupó. Yo hacía mi trabajo y luego los comités se reunían y sancionaban".

Gracias al adelanto de la reunión, el Madrid ganó 24 horas vitales. Convocó a Hugo Sánchez con total normalidad, apeló a la instancia superior y esperó acontecimientos. Incluso su gerente, Manuel Fernández Trigo, comentó a sus íntimos: "No creo que haga falta llegar al comité superior". Porque, si Apelación mantenía el castigo, incluso estaba preparada una reunión de urgencia del Comité Superior de Disciplina Deportiva para decretar la suspensión cautelar del castigo. Hugo tenía que jugar contra la Real Sociedad. Y lo hizo.

El miércoles 17 Apelación anuló el castigo y permitió la presencia del futbolista mexicano contra la Real. Fue entonces cuando empezó a circular el currículum deportivo de Eduardo Torres-Dulce: era socio del Real Madrid ("sí, desde los doce o trece años", reconoció) y tenía un número considerablemente bajo: el 10.956. Era un habitual del Santiago Bernabeu. Se supo también que para sus alumnos en el Centro de Estudios Universitarios Luis Vives, Torres-Dulce era considerado un forofo blanco. "Es una magnífica persona, pero madridista a tope. Siempre lo comentábamos en las clases", declararon a la prensa. "Cuando había exámenes y perdía el Madrid nos puntuaba más bajo, casi puede decirse que nos bajaba un punto las notas", explicaba Juan Carlos Balmaseda en las páginas de este diario.

A Torres-Dulce lo introdujo en el comité el anterior presidente, Sérvulo Ruiz Cámara, a su vez socio del Real Madrid. En su caso con el carnet (en 1988) número 26.092. El hoy fiscal general del Estado renunció a su cargo futbolístico "de forma irrevocable" pocos días más tarde de estallar el caso Hugo Sánchez, el 26 de febrero. "Mantengo que he obrado siempre con absoluta limpieza y honestidad", declaró. La Federación, según dijo, le había renovado la confianza. Pero él prefirió apartarse de un mundo "de suspicacias en el que abundan las filias y fobias más apasionadas".

El remate final de todo el caso fue el partido de vuelta de las semifinales de Copa. El 18 de febrero de 1988 la Real Sociedad se impuso en el Santiago Bernabeu por cero goles a cuatro (Górriz, dos de Bakero y Begiristain) pese a la alineación de gala del Real Madrid: Buyo, Chendo, Tendillo, Camacho, Sanchís, Gordillo, Míchel, Jankovic (Santillana), Martín Vázquez (Llorente), Hugo Sánchez y Butragueño. El manito no marcó.